La mayoría de las suites de la nueva propiedad de 139 habitaciones tienen amplios balcones con vistas a la ciudad, mientras que la arquitectura y el diseño de Rockwell Group incorporan materiales naturales y una paleta de colores neutros.

Una vez que fue una de las fábricas de perfumes más antiguas de la ciudad, el edificio JW Marriott en Madrid conserva algunas características patrimoniales, como columnas de hierro forjado del siglo XIX. En el vestíbulo hay una exposición de frascos de perfume antiguos, libros y perfumes.

Utilizando este bagaje como inspiración, el hotel también ha colaborado con la Academia Española de Perfumería para crear experiencias sensoriales.

Cada invitado es recibido con un té de violeta tradicional o un aroma de romero y luego puede elegir entre cinco ‘fragancias de Madrid’ para colocar en su guardarropa.

También se ofrecen talleres de “entrenamiento olfativo” donde podrán descubrir más sobre sus preferencias.

En asociación con el chef Mario Sandoval, galardonado con una estrella Michelin, JW Marriott ha creado cenas y cócteles que destacan los ingredientes y aromas locales.