La misión, llamada CAPSTONE, o Experiencia de navegación y operaciones de tecnología GPS autónoma Cislunar, es la primera misión de la compañía a la luna, donde la NASA está ayudando con el programa de aterrizaje lunar Artemis.
Como parte de la misión, el cohete Rocket Lab Electron despegará del Complejo de Lanzamiento 1 de la compañía en Nueva Zelanda. La misión estaba originalmente programada para despegar del Complejo de Lanzamiento 2 de la compañía en Virginia a principios de 2021.
«Flexibilidad no es una palabra que se usa típicamente para describir misiones lunares, pero operar dos complejos de lanzamiento nos da la libertad de elegir la ubicación que mejor cumpla con los requisitos y el cronograma de la misión», dijo el CEO de Rocket Lab, Peter Beck, en un comunicado.
La compañía se ha asociado con la NASA para llevar a cabo misiones anteriores utilizando un cohete Electron para mover satélites a la órbita terrestre baja. Fundado en 2017, Rocket Lab se especializa en el lanzamiento de pequeños satélites y ha desplegado un total de 105 en 17 misiones exitosas.
«Nuestro equipo está extremadamente orgulloso de lanzar una de las primeras misiones de exploración para apoyar el objetivo de la NASA de proporcionar una presencia sólida y sostenible en la Luna», dijo la compañía.
Rocket Lab no es la única empresa local que mira a la luna. Space Exploration Technologies Corp., con sede en Hawthorne, recibió un contrato de $ 3 mil millones de la NASA para llevar astronautas a la Luna para el programa Artemis en abril.
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