Canadá y México tienen los equipos de ciclismo en pista más rápidos
Las velocidades de sprint alcanzaron los 60 kilómetros por hora en la pista de Penalullen.
Más de 20 naciones tuvieron que poner a prueba su coordinación, estrategia y resistencia para realizar todos los sprints necesarios para luchar por el oro y asegurar la clasificación en el camino hacia los Juegos Olímpicos de París 2024.
El martes arrancó el ciclismo en la pista de Pinalollen, con Canadá y México emergiendo como los equipos más rápidos en la competencia de sprint por equipos, en la que tres corredores completan tres vueltas en el menor tiempo posible.
Con un tiempo de 43.396, el equipo canadiense ganó la final por la medalla de oro, justo por delante del equipo colombiano que finalizó con un tiempo de 43.421.
“Esta competencia es sin duda la más especial e importante en la que hemos participado”, comentó Tyler Rourke, miembro del equipo ganador, que compitió junto a James Hedgecock y Nicholas John.
La selección Colombia, integrada por Carlos Echeverri, Kevin Quintero, campeón del mundo de ciclismo en pista tras su triunfo en Glasgow, y Rubén Murillo, no se llevó la medalla de oro.
«La verdad es que hicimos un gran trabajo. Es un poco amargo no ganar la medalla de oro, pero los planes de Dios son perfectos, así que no hay nada que podamos hacer al respecto. La competencia es muy alta, trabajamos muy duro para lo que hicimos hoy y sabemos que «podemos hacerlo mejor».
Canadá encabezó el ranking con un tiempo de 43.829 segundos, lo que le permitió avanzar al partido por la medalla de oro contra Colombia, mientras que México (44.569) y Estados Unidos (44.636) compiten por el bronce.
En la competencia femenina, México también obtuvo la medalla de oro, derrotando a las selecciones estadounidense y canadiense. La selección mexicana estuvo integrada por Luz Gaxiola, Jessica Salazar y Yuli Verdugo, derrotando a la selección de Estados Unidos, que incluía a Kelly Ainsley, Kayla Hankins y Mandy Marquardt.
“Esta medalla de plata representa todo el esfuerzo que ha puesto el equipo y poder traerla de regreso a Estados Unidos es un sentimiento indescriptible para nosotros”, dijo Marquardt.
Escrito por Fernanda Castillo y Francisco Vueloux
