Un juez ordenó suspender nuevamente las corridas de toros en la Ciudad de México, días después de que se reanudara la controvertida tradición en medio de protestas de activistas por los derechos de los animales.

El fallo publicado el miércoles prohíbe a los organizadores celebrar corridas de toros hasta que se celebre una audiencia el 7 de febrero sobre el destino de esta práctica centenaria.

El domingo, decenas de miles de espectadores llenaron la Plaza de Toros, la plaza de toros más grande del mundo, para animar a los toreros tras una ausencia de 20 meses.

Afuera, los manifestantes con máscaras de toro y cubiertos de pintura roja sangrienta exigieron el fin de lo que describieron como tortura animal.

En junio de 2022, un juez ordenó la suspensión de las corridas de toros en la Ciudad de México por tiempo indefinido, pero la Corte Suprema revocó esta decisión en diciembre pasado, sin pronunciarse sobre el fondo del asunto.

La última orden judicial, en respuesta a una petición del grupo de derechos de los animales, exige a los organizadores «suspender inmediatamente los espectáculos taurinos» hasta una audiencia el 7 de febrero.

La próxima corrida de toros estaba prevista para el domingo en la Ciudad de México.

El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, propuso celebrar un referéndum sobre el futuro de las corridas de toros en la capital mexicana.

Hasta ahora, sólo unos pocos de los 32 estados del país han prohibido esta práctica, que fue introducida por los conquistadores españoles en el siglo XVI.

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