MADRID – Miles de expatriados británicos celebraron en España después de que el gobierno español anunciara que podrían usar sus licencias en el país y no tener que volver a tomar sus exámenes.
El gabinete español anunció que los británicos podrían volver a la carretera a partir del jueves, pero tienen seis meses para canjear sus licencias por las españolas.
Puso fin a diez meses de disputas diplomáticas entre Gran Bretaña y España sobre el tema, que había enfurecido a muchos expatriados varados.
Después del Brexit, Gran Bretaña llegó a acuerdos expresos con otros 24 países de la UE para permitir que los ciudadanos del Reino Unido usen sus licencias británicas. Sin embargo, en España el asunto se convirtió en un punto de controversia diplomática ya que Madrid presionó a todos los británicos para que cambiaran sus licencias por las españolas.
Muchos de los que no cambiaron sus licencias antes de la fecha límite posterior al Brexit en diciembre de 2020 no pudieron conducir al trabajo o asistir a citas en el hospital, lo que provocó que algunos se quejaran de fatiga.
La prohibición no afectó a los turistas ni a los transportistas.
Los expatriados británicos estaban encantados de llegar finalmente a un acuerdo.
«Estoy sentada aquí llorando como un bebé después de escuchar esta noticia», dijo Deb Lee, de 63 años, que vive en un campamento en Catral, cerca de Alicante, en el sureste de España. «Esto tuvo un gran impacto en mi vida. ¡Qué alivio!»
La Sra. Lee, que es originaria de Oxfordshire pero se mudó a España aunque su esposo es un camionero que todavía trabaja en el Reino Unido, fue llevada al hospital por estrés el año pasado.
No podía asistir a las citas en el hospital ni ir de compras y se sentía aislada.
«El Consejo de Ministros español aprobó el martes un acuerdo mutuo entre España y el Reino Unido sobre el intercambio de permisos de conducción y el intercambio de información sobre infracciones de conducción», dijo un comunicado del gobierno español.
